Fue impresionante entrar en una sala llena de mujeres, en realidad solo mujeres, tanto en el público como en el podio de los oradores. Nunca antes había estado en un taller para mujeres cuando fuí para entrevistar a las participantes de un taller sobre los impactos de género de la guerra contra las drogas en Budapest, organizado por la Escuela de Política Pública de CEU. Por un momento, pude sentir empatía con las mujeres cuando se unen a un taller lleno de hombres. Por supuesto, lo que sentí fue diversión, mientras que lo que sienten ellas es más como intimidación en un mundo dominado por hombres.
En este mundo, como dicen las feministas, casi todos los fenómenos en nuestra vida política, social y económica se construyen desde la perspectiva masculina. La guerra contra las drogas no es una excepción. La noción de que se han pasado por alto los impactos de género de la guerra en las drogas parece obvia.
